Foliculitis decalvante: qué es, síntomas y tratamiento

¿Qué es la foliculitis decalvante?

La foliculitis decalvante es un tipo de alopecia cicatricial que provoca la inflamación crónica de los folículos pilosos. Como resultado, estos se acaban destruyendo y el pelo se pierde en la zona más afectada. Puede afectar también a otras partes del cuerpo, como la barba, las zonas íntimas, el cuello o la cara. Al ser cicatricial, resulta irreversible independientemente de cómo haya originado. Por tanto, el tratamiento tiene que centrarse solamente en retrasar la enfermedad y sus efectos.

Suele afectar más a hombres en edad joven, aunque también se producen casos en mujeres. Al principio, la foliculitis decalvante se presenta una inflamación en el cuero cabelludo que destruye el folículo y comienza a crear zonas de alopecia. Al no tener solución, su desarrollo avanza y en los casos más extremos provoca una calvicie total, al destrozar todas las raíces de nacimiento del pelo.

Causas de la foliculitis decalvante en el cuero cabelludo

A día de hoy, la causa de la foliculitis decalvante es más o menos desconocida. Se cree que puede producirse a través de infecciones bacterianas, que pueden debilitar estos folículos pilosos. También pueden existir factores de riesgo asociados a la genética. Por otro lado, es importante resaltar que no se trata de una enfermedad contagiosa.

Síntomas de la foliculitis decalvante

Principales síntomas:

• Irritación, picor, dolor, escozor
• Inflamación con pústulas rojas
• Mayor pérdida de cabello

La foliculitis decalvante sigue una evolución progresiva y crónica. Aunque resulta incurable, sí que es probable remediar sus síntomas y retrasar su evolución lo máximo posible.

El primer signo suele ser la irritación de la zona afectada: también se puede sentir picor, dolor y escozor. Cuando notes de forma frecuente estas sensaciones, acude a un tricólogo. Si se detecta la enfermedad en una fase inicial, será mucho más fácil ralentizar su desarrollo.

A partir de aquí, se produce una inflamación con pústulas rojas en torno a la coronilla.

Los folículos se destruyen progresivamente, produciendo zonas de alopecia, donde es imposible que el cabello vuelva a regenerarse.

La enfermedad sigue avanzando y se vuelve crónica. La caída de pelo no cesa y genera momentos de mayor pérdida (efluvios), que pueden ocurrir en las diferentes fases del ciclo capilar: fase anágena o de crecimiento, fase intermedia y fase telógena o de caída. Sin embargo, si aplicamos las soluciones adecuadas, este tipo de momentos pueden controlarse y el curso de la enfermedad puede pararse casi prácticamente.

¿Cómo saber si tengo foliculitis decalvante?

Lo mejor para conocer si sufres de foliculitis decalvante es acudir a nuestros centros Svenson, donde tienes examen, diagnóstico del cuero cabelludo y la primera sesión gratuita. Rellena nuestro formulario para pedir cita; con solo el nombre, apellidos, número de teléfono y centro Svenson más cercano. Contamos con los mejores tricólogos y especialistas capilares para poder dar soluciones certeras a tus problemas.

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Diagnóstico médico

El tricólogo, como especialista en el cuero cabelludo, extrae algunos cabellos y realiza una biopsia. Esta consiste en un análisis pormenorizado de una pequeña muestra de tejido o células del cuero cabelludo. Con este método científico, el doctor podrá investigar sobre tus problemas capilares y solucionarlos así con mayor acierto. A partir de lo obtenido en estos resultados, el especialista podrá recomendar el tratamiento correspondiente.

Foliculitis decalvante en mujeres

Aunque no es lo más frecuente, la foliculitis decalvante también puede aparecer en mujeres. Sin embargo, las mujeres pueden sufrir otro tipo de foliculitis en el resto del cuerpo (vello enquistado). En este caso, algunos pelos no brotan correctamente y se cubren de piel. En algunos casos, se puede producir una infección. De todas formas, esta dolencia es reversible y el pelo suele volver a crecer después de tomar las formas.

Es conveniente que las mujeres tomen algunas precauciones:

• Está totalmente desaconsejado el uso de ningún tratamiento de belleza, ya que solamente podría extender la infección.
• No se recomienda tocar, explotar o rascarse las ampollas, ya que la infección se contagia por todo el cuerpo. A pesar de las molestias, es mejor esperar a que desaparezcan por sí solas.
• No se puede depilar o afeitar la zona afectada: si explotan las pústulas, se extiende por todo el cuerpo.
• Nunca automedicarse ni aplicar ningún producto sin autorización de un médico. Puede ser contraproducente y extender el problema por todo el organismo.

¿La foliculitis decalvante se cura?

Desafortunadamente, la foliculitis decalvante no tiene cura; así que sus consecuencias son irreversibles. Se trata de una enfermedad rara que puede desencadenar consecuencias bastante rápidas si no conseguimos frenarla a tiempo. Nuestro pelo es el que está en juego, así que lo importante es tener un tratamiento lo más pronto posible.

En las etapas iniciales de la enfermedad, cuando se producen picores pero todavía no hay zonas alopécicas, es más fácil retrasar o atenuar los efectos. Si el diagnóstico se produce en fases medias o avanzadas, resulta más complicado responder a los problemas que se hayan creado.

Tratamiento efectivo y recuperación

Al no tener cura, no existe ningún tratamiento capaz de curar esta afección de modo definitivo. Sí pueden frenar sus efectos, mediante medicamentos, corticoides y ciertos antiinflamatorios. Una vez se consiga frenar su efecto y desaparezcan los forúnculos (bolsas de pus), el problema quedará solucionado de forma temporal. Sin embargo, una vez que se produce la primera foliculitis decalvante, puede volver a producirse y generar más áreas calvas.

Una buena solución puede ser el trasplante capilar. Solo requiere una intervención quirúrgica muy sencilla. Los folículos pilosos se extraen de las zonas más pobladas y se colocan en las menos densas. El resultado es una mejor imagen estética y un crecimiento natural del pelo.

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